SIMPOSIOS

Coordinador

Nos encontramos en una situación de grave crisis ecosocial (Calero, Mayoral, Ull y Vilches, 2019; Klinenberg, Araos y Koslov, 2020) siendo necesario alfabetizar ambientalmente a los ciudadanos y ciudadanas para afrontar el desafío del cambio en nuestros modos de vida originado por la situación de decrecimiento en la que estamos inmersos. Desde diversos organismos internacionales y nacionales — Agenda 2030 de las Naciones Unidas (UNESCO, 2017), Comisión Europea (2020) o, a nivel estatal, la Estrategia Española de Ciencia y Tecnología y de Innovación (2020-2027) —se advierte de esta situación y los esfuerzos se encaminan a realizar llamamientos y lanzar propuestas dirigidas a los agentes políticos, a la comunidad científica, a los educadores y a la ciudadanía en general, instando a tomar medidas de manera urgente. En este marco, consideramos que la educación y, concretamente, la formación del profesorado del siglo XXI, tienen un papel crucial en la generación de conocimiento ofreciendo respuestas a la sociedad actual relacionadas con la sostenibilidad tratando retos y problemáticas del siglo XXI. A este respecto, nos referimos a la alfabetización ambiental entendida como la capacidad de un individuo de entender y reflexionar sobre la interrelación entre los sistemas sociales y la biosfera, poniendo en práctica la toma de decisiones individuales y colectivas enfocadas hacia la mejora (Gunckel Mohan, Covitt y Anderson, 2012; Stables y Bishop, 2001). La problemática socioambiental es compleja, poliédrica y multifactorial (Nicholls y Thorne, 2017) y su tratamiento didáctico no es menos complejo, abarcando dimensiones interdependientes —conocimientos, comportamientos, habilidades y valores— no solo para su comprensión, sino para que esto se traduzca en cambios reales. Y esto no se produce de manera inmediata, directa ni lineal influido por determinados obstáculos de diversa naturaleza y origen (Clayton, 2019; Kollmuss y Agyeman, 2002). Para conseguir un cambio de actitud y mayor compromiso socioambiental nos parece fundamental conocer los obstáculos que lo dificultan para entender qué tipo de estrategias formativas y comunicativas deben proponerse bajo esta finalidad (Breslyn, et al., 2017). Bajo estas premisas, en este simposio pretendemos abordar algunas cuestiones relevantes sobre esta cuestión. Creemos importante conocer la influencia de las diferentes fuentes de información que pueden originar resistencia, desde el sistema educativo, la familia y el entorno social próximo, internet y medios en general, pues dan claves tanto sobre las dificultades como sobre los posibles puntos de anclaje en un proceso formativo o de concienciación. Otro factor a considerar de gran complejidad es la tipificación de las barreras que se presentan según el perfil o sector al que se va a formar (a futuros docentes, a formadores en educación ambiental, ecologistas, etc.). También, trataremos los obstáculos relacionados con las emociones que perfilan diferentes respuestas o posturas ante el conflicto (dependiente del grado de percepción del riesgo, conformismo, fatalismo o incluso negacionismo ante la problemática, el optimismo tecnológico, falta de espíritu crítico, individualismo, etc.). Sin olvidarnos que los obstáculos de aprendizaje de esta problemática están ligados al contenido, es decir a los conceptos implicados ya complejos en sí (ciclos de materia y flujo de energía en la biosfera, ecosistema, cambio climático, agotamiento de los recursos, extinción de la biodiversidad, etc.), lo que llamaríamos barreras de conocimiento. Por ello, abordamos algunas dificultades de compresión que presentan los docentes durante su formación inicial sobre temas como el cambio climático. Finalmente, como posible escenario formativo que ayuda a superar algunos de estos obstáculos se presentan los resultados obtenidos de una experiencia de aula bajo la metodología de Aprendizaje Basado en Reto (ABR).

Ponencias
JOSÉ EDUARDO GARCÍA DÍAZ
profesor jubilado universidad sevilla
EL PENSAMIENTO SIMPLIFICADOR COMO OBSTÁCULO A SUPERAR EN EL TRATAMIENTO DE LA CRISIS ECOSOCIAL