Una tipología concreta de la violencia que se ejerce en internet es la denominada violencia de género en redes sociales. Esta violencia se diferencia del ciberacoso tradicional por los motivos que generan los ataques, y por las consecuencias que acarrea. El objetivo de este estudio fue realizar un análisis preliminar de las propiedades psicométricas del Cuestionario de Violencia de Género en las Redes Sociales. El cuestionario fue administrado a una muestra de 387 alumnos de educación secundaria obligatoria (40.5% chicos), de edades comprendidas entre los 12 a 18 años (M = 15.56). Se aplicó un análisis factorial exploratorio con el objetivo de analizar la estructura dimensional del Cuestionario de Violencia de Género en las Redes Sociales. La consistencia interna (alfa de Cronbach) se calculó para las puntuaciones del cuestionario. Se halló una estructura de tres factores correlacionados (Violencia Sexual, Estereotipos y Valoración del Rol de Género). La consistencia interna fue adecuada. Las correlaciones obtenidas apoyan la validez convergente del cuestionario. En conclusión, las propiedades psicométricas del Cuestionario de Violencia de Género en las Redes Sociales fueron satisfactorias, obteniéndose un instrumento fiable y válido para analizar la violencia de género en la adolescencia. Un conocimiento profundo del origen y mantenimiento de estas conductas permitirá utilizar estos datos para el establecimiento de medidas preventivas necesarias que garanticen el bienestar personal, social y académico de los alumnos.

El objetivo principal fue analizar si existen diferencias en la victimización en violencia de género a través de las redes sociales según el rendimiento académico. Asimismo, se pretende identificar estas posibles diferencias en el alumnado-víctima con respecto a su rendimiento académico (suspensos, aprobados, notables y sobresalientes). Método: Se administró a una muestra de 1164 alumnos el Cuestionario de Violencia de Género en Redes Sociales (Martínez-Monteagudo et al., 2023) y se recogió la media de rendimiento académico de la última evaluación del alumno. Se realizaron diferencias de medias (ANOVA) para comprobar si existían diferencias estadísticamente significativas entre los cuatro grupos descritos atendiendo a la medida general de victimización y factores específicos (violencia sexual directa, estereotipos y apartarse de la normatividad sexual femenina). Posteriormente, con la prueba post hoc Bonferroni se analizó entre qué grupos se encuentran dichas diferencias significativas. Los resultados indicaron diferencias estadísticamente significativas (p = .001) en la media de victimización en violencia de género en las redes sociales y que éstas se encuentran entre el alumnado con suspensos (M =18.59) con respecto al grupo de notables (M =16.63; p = .0024) y sobresalientes (M =15.54; p = .001). Así, las víctimas de violencia de género suspenden más y muestran diferencias significativas con las víctimas de los grupos notables y sobresalientes. En todos los factores analizados, también hubo diferencias significativas entre las medias de victimización de los grupos suspensos-sobresalientes. Discusión/Conclusión: La victimización muestra mayores índices de bajo rendimiento académico y con diferentes perfiles según las calificaciones medias alcanzadas, corroborando la necesidad de medidas educativas preventivas y de atención específicas a las víctimas de violencia de género en redes sociales.

El Uso Problemático de Internet (UPI) describe un patrón de comportamiento en el que hay una preocupación excesiva por el uso de Internet que interfiere y causa un malestar significativo en la vida de dicha persona. Investigaciones previas han hallado una relación entre el UPI y variables emocionales como la depresión y la ansiedad. El objetivo de este estudio fue comprobar si existe relación entre los factores del UPI (UPI total, UPI pérdida de control, UPI necesidad emocional y UPI dependencia) y los niveles de depresión y ansiedad en una muestra de 1.164 estudiantes (51.5% mujeres) de 12 a 18 años de cuatro institutos de la provincia de Alicante a los que se les administró el Cuestionario de Uso Problemático de Nuevas Tecnologías (Delgado et al., 2021) y la Escala de Depresión, Ansiedad y Estrés (DASS-21; Bados et al., 2005). Los resultados indican una relación significativa y positiva entre todos los factores del UPI y los niveles de ansiedad y depresión. Siguiendo los criterios de Cohen, hay una relación de elevada magnitud entre ansiedad y depresión (0.7). Además, las correlaciones moderadas halladas, por ejemplo, entre UPI necesidad emocional y ansiedad y UPI necesidad emocional y depresión, sugieren que el UPI está asociado con incrementos en depresión y ansiedad. Sería recomendable abordar el uso excesivo de internet en intervenciones de salud mental. Por otro lado, las correlaciones de magnitud pequeña observadas en algunos factores específicos del UPI, por ejemplo entre UPI pérdida de control y ansiedad, sugieren que estos aspectos del comportamiento en Internet pueden tener un impacto menor, pero todavía significativo, en la salud mental. Las implicaciones prácticas de estos resultados son discutidas.

La violencia de género representa una de las principales preocupaciones sociales en la actualidad. Los centros educativos diseñan y aplican intervenciones orientadas a prevenir su aparición y desarrollo, tanto en entornos presenciales como virtuales (Violencia de Género en Redes Sociales, VGRS). El presente estudio planteó dos hipótesis: a) las intervenciones educativas en este ámbito están relacionadas con los intereses evolutivos y vitales de los destinatarios; b) las actuaciones realizadas incluyen la prevención tanto de la violencia de género como de la VGRS. Para realizar dicho análisis, se realizó una búsqueda en Scopus, Scielo, Web of Science, ERIC y PsycAPA. Después de preseleccionar 5,118 documentos, finalmente se analizaron 17 buenas prácticas educativas que abordaban la problemática expuesta, centrándose en cinco aspectos principales: la prevención de la aparición e interiorización de estereotipos de género, el desarrollo de las habilidades socioemocionales de los destinatarios, la actuación y proactividad ante la violencia de género, el establecimiento de hábitos y relaciones saludables, y el respeto a las distintas identidades de género existentes. El análisis de estos datos verificó la primera hipótesis, ya que el trabajo realizado con niños se relacionó con sus necesidades evolutivas, previniendo el desarrollo de estereotipos de género que podrían desembocar en comportamientos violentos. En cuanto a las intervenciones realizadas con adolescentes, se constató una relación entre sus necesidades socioemocionales y los temas trabajados. Sin embargo, la segunda hipótesis no se confirmó, puesto que no se encontraron intervenciones educativas relacionadas con la prevención de la VGRS. Como líneas de investigación futuras, se propone profundizar en el efecto que tienen estas acciones educativas para evitar la aparición y desarrollo de la violencia de género en sus múltiples manifestaciones, así como identificar intervenciones educativas dirigidas a destinatarios adultos.

El creciente uso de las redes sociales ha motivado un aumento notable de los casos de ciberacoso. El ciberacoso, entendido como aquellas agresiones que se producen a través de internet, es cada vez es más frecuente. Estudios recientes muestran que los jóvenes con discapacidad corren el riesgo de sufrir ciberacoso. Las situaciones de acoso cibernético en los jóvenes con discapacidad pueden generar graves repercusiones psicológicas, emocionales y sociales. Sin embargo, poco es conocido sobre este tipo de agresiones en las personas con algún tipo de discapacidad. Por tanto, el objetivo de este trabajo es analizar las características y la frecuencia del ciberacoso de los adolescentes con discapacidad. Para ello, se ha realizado una revisión sistemática de la literatura publicada entre 2017 y 2024 sobre los trabajos que analizan el impacto del ciberacoso en los jóvenes con discapacidad en diferentes bases de datos: Web of Science, Scopus, PsycINFO, PsicoDoc y PubMed. Se identificaron 169 artículos de los cuales fueron seleccionados 35 para su análisis. Las condiciones objetivo incluían discapacidades físicas, discapacidades intelectuales y de aprendizaje, discapacidades sensoriales y Trastorno del espectro autista (TEA). Los resultados revelan que el impacto documentado más común fue TEA, seguida de trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) y discapacidad intelectual. Se identificaron lagunas sobre las investigaciones de discapacidades sensoriales y físicas. Se pone de manifiesto la necesidad seguir abordando este tema y analizar el efecto que tiene el ciberacoso en las distintas discapacidades.